viernes, 29 de diciembre de 2006

17 EL CABALLERO DE LA ROSA EN LA SALA DE CASTIGOS

Acto de corrección
El torturador del cepo
el caballero de la Rosa
El Cardenala
La Triministra en su estado vampírico
Otros











23 DIÁLOGOS:

Anónimo dijo...

La doncella Therese ha sobornado a dos de los guardias, a uno con dinero y al otro con los favores de su sirvienta, para poder entrar a ver dónde han puesto o pondrán al Caballero de la Rosa.

Anónimo dijo...

Ay, cuánto he tenido que hacer por mi señora. Tan vilmente me ha tratado este guardia. Pero todo sea por servir a mi doncella que se ha enamorado como una adolescente del Caballero de la Rosa... (suspira y se acaricia el bajo vientre)

Hasta cuándo durará todo esto, me pregunto. Hasta cuándo más desgracias en el Reyno.

Anónimo dijo...

La doncella Therese ha cometido el mayor error de su vida.
Habrá de arrepentirse y llorará lágrimas de sangre...

Anónimo dijo...

Parece que aquí hay onda, porque tienen a un tipo en una cama de madera.

Voy a ver a qué hora es la fiesta.

(Aunque sea la princesa rusa, pronto se da cuenta de que ahí no hay fiesta, sino están torturando al Caballero de la Rosa. Permanece escondida y siente admiración por este joven que no se ha quejado ni mínimamente ante tanto tormento y suplicio a que es sometido)

Mejor me voy luego antes de que me vean y quizás qué se les ocurra hacerme a mí, ahorta que les ha dado con andar husmeando, acusando y moralizando... Claro desde que llegó ese El cardenala (piensa mientras escapa arratrándose por el suelo).

Anónimo dijo...

...volvemos de comerciales para anunciarios que la tragedia está aquí incubándose en el bajo vientre del reyno por causa del kripalys...


(Se quitan las máscaras y salen corriendo desnudos al jardín)

Anónimo dijo...

(A los chicos del coro)

pst pstttt, apúrense,
las bacantes llegaron ya
llegaron ya
trayendo rica cha rica cha...

(deja una botella con forma de hoja de parra junto a la puerta)

...os digo (mirando al público) que si este jovenzuelo bebe de mi néctar, no habrá de dolerle el tormento y a cambio sólo sentirá espasmos org... uyyyy
no lo puedo decir delante de la Triministra que es frígida...

Rafa dijo...

(La piel de DLR se estira cada vez más...

Por su mente vagan ambrosías y vapores de carne; mientras tanto y ante la sorpresa de los presentes, en la erectitud de su miembro comienzan a aparecer unas tenues letras capitales, formadas claramente por sus gruesas venas llenas de licor de sangre...

En éxtasis y con todas sus lenguas dislocadas en dirección al cielo, se le escapa un nombre, casi inaudible.

Soltando una lágrima de placer, desde la punta de su glande sale un lento vapor seminal que asciende hasta la cumbre del castillo, en donde se condensa como tres gotas rojas.

De pronto las letras insinuadas en su carne, se convierten en destello plasmático y una onda de calor inunda la habitación por completo.

Todos los presentes, menos uno, caen al suelo y entran en profundo trance...)

Thérèse Bovary dijo...

La doncella Therese y su criada que han estado observando la escena escondidas tras un muro que el guardia corrupto les indicara, aprovecha la ocasión para liberar al caballero de la Rosa:

Amado mío, (dice mientras comienza a desatar las correas que le ciñen con violencia muñecas y tobillos), cuánto habéis sufrido por mí. Ahora que todos duermen el sueño de tres minutos por arte de magia y de soborno, os pido que me me digaís si el nombre que pronunciasteis mientras el placer os consumía era el dulce nombre de Therese.

Responded pronto que el tiempo se termina

grandchester dijo...

(Una novicia quinceañera,
designada por Su Eminencia
para atestiguar el procedimiento)

(Visiblemente perturbada)

Informaré a Su Eminencia,
para que cuelguen al brujo
antes que nos pervierta
a todas.

(Toca el falo, descuidadamente
al pasar...)

(Se lleva disimuladamente
una mano a los labios.)

(Cae en el trance)


(Toca el falo, descuidadamente
al pasar...)

(Se lleva disimuladamente
una mano a los labios.)

(Cae en el trance)

grandchester dijo...

(Arriban agitados
El Rey y El Cardenala)

(Cardenala, observa la escena)

(Sólo queda en pie la Triministra,
todo su cuerpo está mojado)

Triministra!

(Sin prestar atencion a
los líquidos que empapan
el cuerpo de la triministra)

Sientimos haberos hecho esperar.

(Ausculta a la novicia...)

(Le olfatea las manos
y los labios...)

(Hace una mueca)

(Considera y dicta
una sententencia
seca...)

Su poder viene de Priapo
y de Dionisio...

(Se dirige al Rey,
con voz baja y profunda,
estremecedora.
Señalando con el dedo
del anillo
al desdichado Caballero)

...Lo procedente es caparlo.

Anónimo dijo...

(LEar mirando a el Cardenala)

Su Cardenala: teniais razón, los otros casos podrían esperar. Es de Príapo y Dionisos su poder, pero también de Belcebú y Lucifer. Ved la tendalada a vuestro alrededor. Pero el Historiador ha dicho que este muchacho no es Dioniso y le creo y tampoco es caballero, y más le creo. Ergo, si no es inmortal, ni lo protege poderoso caballero, vos lo dijistéis y por vos refrendo la acción:

(A los guardias que han entrado de prisa tras el Cardenala y su Machistad)

Vos, Sir Ugolino, por ser el capitán de mi Guarduia personal y Jefe de los SS: acá, con anuencia y consejo de el Cardenala, capad al vil de la Rosa, y por consejo y resolución mía, es decir de su Machistad King Lear, emasculadlo, y tirad esos restos fétidos a los cerdos, ya. Entregad desnuda a la que se hace llamar fiel sirvienta a la plebe para que la violen hasta la muerte y llevad encadenada -pero con cadenas de satén beige- a la Doncella Therese hasta su aposento y montad guardia en la puerta con máscaras antigases y antiechizos. Y que Merlín se quede por allí, invisible para que nada más ocurra de extraños y viles sortilegios. Y eso sí, que mantenga tranquila su varita mágica, y sólo la ocupe para enderezar entuertos.

(Todo ocurre veloz y en forma paralela. Sir Ugolino castra y emascula al caballero de la Rosa y donde estaba su pene y gónadas sólo queda un forado sangrante y terrible. Sangra. Bota cuajarones de sangre por la boca. Tose. Se desmaya. La fiel sirvienta es desnudada por los guardias, que porceden a violarla y luego la arrojan por una ventana a la plebe que continúan violándola hasta que muere. Entretanto se llevan atada a a la Doncella Therese con cadenas de satín beige a su aposento. Lllora, Impreca. Entran los cerdos y Sir Ugolino arroja los restos príapicos de el de la Rosa a los cerdos que los devoran con avidez. Lear mira la escena taciturno, con los puños cerrados con fuerza. El Cardenala no parece impresionado ante el baño de sangre que acaba de tener lugar)

A lo lejos se escucha un laúd tañir

Anónimo dijo...

Mansa cagadita. Pero se intuía que algó así pasaría. Muy apurón el mucachón de la Rosa y muy enamoradiza la aspirante a reina. ¿Que le deparará el Destino? ¿volverá a amar a su Machistad despuès de que le capara al don juan? ¿Y qué gato encerrado hay aún aquí?

Anónimo dijo...

Triministra, estáis empapada y cómo oléis, a sangre, nenúfares, sándalo, semen, pétalos de rosa, benjuí, orina, espuma de mar y kripalys: ¿pero qué ha ocurrido aquí? Además os veo taciturna, más pálida que la Dama de las Camelias. Y tras los rojos labios de vuestra tercera cabeza, os han crecido los colmillos. ¿qué ocurre acá? Una nueva desgracia o plaga.

(A Sir Ugolino.)

Clavad una estaca en el corazón del de la Rosa, cortadle la cabeza y después quemad el cuerpo hasta que quede reducido a cenizas. Acá veo un caso de vampirismo. No podemos correr riesgos.

(Sir Ugolino procede con la misma rapidez de antes. En un abrir y cerrar de ojos del cabellero de la Rosa sólo queda un puñado de cenizas.)

Dadme esas cenizas, que yo las llevaré en un ánfora en mi cinte para que nadie ose robarlas. Además, id a los aposentos del de la Rosa y llamad al Bufón y a Grandchester, aunque parecen ser el mismo, para que quemen ese aposento infectado por la plaga de Nosferato. Que arda, presto. El Reybo esrá en peligro. Quiero ver llamas en aquel lugar, donde aulla el lobo. ¡Como no haberme dado cienta antes que era un vampiro. Y el Historiador. El debió preverlo.

(a el Cardenala)

¿Y vos que pensaís de todo eso su Exelencia. Qué dice el Vaticano al respecto?

Anónimo dijo...

El coro tiene razón,
mucha razón tiene el coro,
pero en este reyno de sangre
la razón no prima
no prima la razón...

Espérense nomás,
la mansa cagá
que seguirá quedando,
porque aquí hay muchos
que a su machistad quieren desocuparle el trono.

He dicho

grandchester dijo...

(Cardenala, al Rey)

Majestad,
creo que este
desafortunado incidente
ya está finiquitado.

¿Regresamos
con el Real Consejero
a seguir con conversaciones
y tratados?

Thérèse Bovary dijo...

¡Aquí ningún asunto está finiquitado!

Mi criada y yo liberamos al Caballero de la Rosa cuando todos dormían presos de la magia, menos uno. Ese uno era el guardia sobornado, al que pusimos en la mesa de torturas, mi criada, yo y el Caballero de la Dulce Rosa, aún magullado y dolorido.

De manera que el cuerpo capado y hecho trizas no fue otro que el de el guardia corrupto.

Mi caballero de la Rosa ha huido en uno de los corceles que abrevaban en las afueras de los salones de la Triministra.

Es cierto que el caballero ha huido, pero vendrá a liberarme de la prisión en que mi rey, su machistad, me ha puesto.

Lo siento my king Lear, nos habíamos amado tanto, pero vos con vuestros celos y vuestro machismo me habéis dejado más fría que un pescado.

No me duelen las sogas de satín beige con que habéis mandado amarrar mis manos y tobillos. No le temo a toda la guardia que me vigila. Solo os temo a vos, que del amor saltáis al odio, y del odio a los deseos de venganza y de la sed de venganza a hacer prisionera a quien tanto decíais que amabais.

Therese
que a pesar de todo os respeta y os ama como a nadie amó nunca.
Eso debéis saberlo mi Rey, que me hacéis sufrir en este encierro.

Thérèse Bovary dijo...

Trministra, el Bufón os anda buscando, pregunta a todos por su Trina con desesperación.
Cantactadlo

Anónimo dijo...

Triministra: espero que el burbujeante Krypalis del Nuevo Año Real se os haya despejado de la mente: habéis visto mi dilema como se ensancha y me hiere y me asesina desde mi mismo amor y ahora despecho... pero hemos sido engañado por una Doncella, ¡una sola Doncella que se devate entre sentimientos confusos!. ¡Un dama romántica!¡Hay que dar con el de la Rosa y reducirlo a polvo. Sino no podré con la Cardenala avanzar en los Regios asuntos de este Reino. Sir Ugolino, que enviará vuestro curriculo para que se sepa que es vero caballero y no un don Juan, falsario, como en de la Rosa, es nuestro Mr. Wolf, The Cleaneng del Reyno. Dadle vos y la Cardenala, postestad y no dejará huella del vil. No podemos saber que la plebe se entere de este engaño: toda la cúpula real engañados por la Doncella...

Y, a pesar de mi amor, o por el, desgarrado estoy entre dos pasiones, el deber de Reynar y la pasión de amar. Como Ministra del corazón o los sentimientos: ¿Qué me recomendáis?

Anónimo dijo...

Eminencia, Sacra Cardenala: lo mismo que su Chantidad pensaba yo, mas habéis visto cómo hemos sido engañados por una Doncella, pero con más ardides que Odiseo, el de los mil... ¿Qué haremos? ¿Satanás habrá acá metido su rabo o su...? Además una inocente violada y despedazada por ayudar temerosa en sus caprichos a la Doncella, que atada está en su aposento y debidamente custodiada. ¿Qué será de este Reyno, si la futura Reina no entra en razón y entiende las razones del Rey? Ah, Cardelana, como yo también por los dardos de Cupido obnuvilado estoy, dejo por ahora estos asuntos en vuestras manos, porque presto a desatinar con mi ira redoblada estoy. Y si la plebe o Vladimir Ilich o Tsé Tung se enteran, acá, fijo que hay revolución... Sir Ugolino podrá ayudaros en este malhadado impasse, es un vero caballero y muy letal.

Por último poned un precio a la cabeza del follón, en Euros, para que sea desmembrado y sus restos devorado por los perros de montería.

Y el aposento del de la Rosa destruid o avilitadlo a Sir Ugolino para que comande las tropas. Merlín es demasiado mago y el Historiador, muy histrión. Y destruid con fuego de dragón el paso entre las camaras consabidas.

La Triministra además ha sido vampirizada por un Nosferato que en el Reyno se ha infiltrado. el Heraldo anoche armó un follón en el teatro, pero eso es ya asunto menor. Espero, no acá, sino en la recámara del consejero real, vuestra respuesta y vuesyro plan. Y también que atine el Bufón. Estamos al borde de la perdición

Anónimo dijo...

Si me permitís: yo tengo un plancito y la solución a este caso. Lo hago por su Machistad, que tantas veces su alcoba he barrido y..., ejem..., desempolvado cuando la Doncella en busca de "Rosas" anda, como Caperucita de fresas en el bosque.

(Aparte)

Y pensar que a mí me gustan así, machotes, celosos, decididos a matar y a capar por amor, que sepan imponer la fuerza, hay! si a mí me amarrara y me encerrara con lazos de satín beige, o, cadenas herrumbrosas, hay! con cuanta más pasión le barrería la real alcoba y le preparatía perniles con ají de merquén del sure. No esas viandas de no sé donde de la guatona de la Cocinera republicana y su tapadera, la Cocinera Socialdemócrata!

Sólo me basta mi escoba y unos polvitos de Merlín... mágicos claro está...

Lila Magritte dijo...

(Un murciélago baja desde la columna lateral y se posa sobre la silla de torturas)

Veo que prima el malentendido y cada cual sigue su instinto. Más desgracias no puede haber en el castillo... a mí me mordió un vampiro y nadie parece darse cuenta...

Y yo también mordí a alguien...

Bufón de la Corte dijo...

(Se presenta con un botiquín
de primeros auxilios
y al más puro estilo
"Cuidadora de Gansos"
prepara agua
y mustio musita)

Triministra,
recostaos, tranquila...

Yo os cuidaré...
Yo os cuidaré...

Lava uno de los cuellos trinos,
y le masajea,
bajando hacia los seis senos.

Triministra! Oh!
Triministra!!

Lila Magritte dijo...

(Quitándole la mano)

Fue en el cuello, ¿acaso no ves la marcas?

E N E L C U E LL O...